Hace unos meses supimos que Qualcomm y Samsung iban a empezar una estrecha relación, ya que la firma conocida por sus SoC Snapdragon había confiado en Samsung la fabricación de sus nuevos Snapdragon 835.
Ambas compañías firmaron un acuerdo donde Samsung prometía que el Snapdragon 835 utilizaría la arquitectura de fabricación de 10 nm, mientras que Qualcomm ofrecía un amplío volumen de negocio, pero al parecer este acuerdo escondía algo más.
Según hemos podido saber hoy, en este acuerdo Qualcomm se habría comprometido a suministrar en exclusiva la primera remesa de Snapdragon 835 a Samsung, quien destinaría el SoC a su nuevo Galaxy S8.
Esta situación habría obligado al resto de fabricantes, entre ellos LG, a retrasar el lanzamiento de sus nuevos tope de gama hasta bien entrado el año o escoger un procesador anterior.
Este acuerdo habría sido el culpable de que el HTC U Ultra llegara con un SoC Snapdragon 821 y también habría obligado a LG a decantarse por este SoC para su LG G6.
Por el momento sólo queda esperar hasta que Samsung o Qualcomm se pronuncien al respecto para confirmar o desmentir esta información.