Hace unos días un apareció un vídeo en Youtube donde pusieron a prueba la resistencia IP68 de los Galaxy S7 Active, supuestamente la versión ultrarresistente del último tope de gama de Samsung, el cual no salió muy bien parado.
En estas pruebas metieron dos Galaxy S7 Active en una vasija de presión para simular una profundidad de 1.5 metros durante 30 minutos, donde ambos terminales sufrieron daños por agua en la pantalla y botones, algo que puso en duda la resistencia del terminal.
Ahora Samsung ha hecho unas declaraciones en relación a este fallo, que son las siguientes:
El Galaxy S7 Active ha pasado pruebas rigurosas para asegurar la certificación IP68 de resistencia al agua.
Samsung está detrás de esta certificación de resistencia al agua, y reemplazará cualquier Galaxy S7 Active bajo su garantía normal, si ocurriera cualquier daño.
No sabemos si los problemas provocados por agua en estos dos Galaxy S7 Active se trata de un problema aislado o es algo general, aunque siempre tranquiliza que Samsung haya asumido la responsabilidad de cambiar cualquier unidad que esté defectuosa.
