Desde que Samsung empezó a entregar las unidades de reemplazo del Galaxy Note 7, no hemos parado de hacernos eco de noticias en las que se veían como estas unidades “seguras” seguían explotando.
Tras ver varios casos, Samsung ha decidido paralizar la producción del Galaxy Note 7 al comprobar que, pese a sus esfuerzos, estas unidades revisadas siguen explotando en manos de sus usuarios.
Sólo en Estados Unidos son cuatro los casos confirmados de Galaxy Note 7 “seguros” que han explotado, uno de ellos obligando a desalojar un avión y otro en manos de una joven mientras lo estaba utilizando.
Las palabras de un funcionario de un proveedor de Samsung han sido las siguientes:
“La suspensión es en cooperación con los Reguladores de Seguridad de los Consumidores de Corea del Sur, Estados Unidos y China”. “Esta medida incluye una planta de Samsung en Vietnam, que es responsable de los envíos mundiales del Galaxy Note 7”.
Todo parece apuntar a que pronto podríamos ver de nuevo una retirada masiva del Galaxy Note 7 como motivo de prevención, aunque por el momento no hay nada oficial y tocará esperar a que Samsung haga alguna declaración al respecto.